Jacinta
Pasache tiene una hija de tres años y aún no le ha tramitado el DNI. Sabe qué
es obligatorio; sin embargo, le resulta bastante tedioso y complicado asistir a
la RENIEC, donde cree que siempre demoran en atender y que el ambiente no es
agradable, mucho menos si va a ir con la niña. Al momento de querer
matricularla en el pre kínder de su colegio, nota que es indispensable este
documento, por lo que se ve obligada a ir a adquirirlo. Ella se dirige a la
institución de la RENIEC ubicada en el distrito de San Luis, va con su hija
pues sabe que le darán atención preferencial y logrará hacer todo un poco más rápido.
Al llegar observa una gran fila que abarca la mitad de la cuadra. La gente
estaba seria y con mala cara, el lugar estaba sucio y parecía ser peligroso. Se
demoró en encontrar el local, pues no poseía cartel alguno que indicara su
ubicación. Cuando llegó, la vieron con su hija en brazos y la llamaron para que
pasara al inicio. Ingresó y notó una increíble diferencia en el ambiente,
estaba mucho más organizado, limpio, y sobretodo ordenado. Jacinta sintió un
gran alivio y el trámite que creyó sería molesto y pesado, duró tan sólo quince
minutos. La señorita que la atendió resultó ser bastante agradable y gentil. Se
fue bastante satisfecha por la buena atención que le habían dado.
Es sábado, Ana Silvia necesita ir a renovar su DNI desde hace ya algún tiempo. Por fin decide ir. Asiste a la RENIEC del distrito de San Luis, ella detesta hacer esos trámites, pues considera que siempre le dan una pésima atención. Son las doce y treinta y cuatro del mediodía y las puertas de aquel centro ya cerraron. La sangre le sube a la cabeza y con rabia empieza a tocar el gran portón de metal con furor. ¡Abran la puerta! – grita desesperadamente. Se abre la ventanita colocada en la puerta y con voz serena el portero le responde que ya cerraron. Ana Silvia empieza a gritar y a hacer un escándalo, hasta pide hablar con su supervisor, insulta al conserje y a la institución. Al ver esta actitud, una señora que también ha llegado tarde, sigue sus pasos y amabas tocan la puerta de metal con monedas para hacer el sonido aún más fuerte. Luego de quince minutos, al no recibir respuesta, deciden irse indignadas y hablando mal de este centro.
Es sábado, Ana Silvia necesita ir a renovar su DNI desde hace ya algún tiempo. Por fin decide ir. Asiste a la RENIEC del distrito de San Luis, ella detesta hacer esos trámites, pues considera que siempre le dan una pésima atención. Son las doce y treinta y cuatro del mediodía y las puertas de aquel centro ya cerraron. La sangre le sube a la cabeza y con rabia empieza a tocar el gran portón de metal con furor. ¡Abran la puerta! – grita desesperadamente. Se abre la ventanita colocada en la puerta y con voz serena el portero le responde que ya cerraron. Ana Silvia empieza a gritar y a hacer un escándalo, hasta pide hablar con su supervisor, insulta al conserje y a la institución. Al ver esta actitud, una señora que también ha llegado tarde, sigue sus pasos y amabas tocan la puerta de metal con monedas para hacer el sonido aún más fuerte. Luego de quince minutos, al no recibir respuesta, deciden irse indignadas y hablando mal de este centro.
Fuente propia
Análisis:
El análisis de ambos casos se
realizarán mediante la teoría de Erving Goffman sobre el performance o
actuación. A este se refiere con
la actividad del individuo que tiene lugar ante un conjunto particular de
elementos del exterior, que influenciarán sus acciones. El contexto, es decir la fachada,
propiciaba a la persona a generar prejuicios acerca de cómo sería el trato
dentro de la institución. Al ser en una zona peligrosa y ni si quiera tener un
cartel que anuncie que ahí se econtraba la RENIEC, hacía pensar a las personas
que esto significaría una mala atención dentro del local. Sin embargo, eran tan
sólo prejuicios, pues en el primer caso pudo comprobar lo contrario.
También encontramos una realización dramática, pues en ambos
casos se espera cierto trato por parte de la institución, y a diferencia del
segundo caso, en el primer caso si se cumple. Lo que siempre se espera de una
entidad es que brinde un buen trato y que el cliente salga satisfecho. Cuando
llegó la señora tarde, se fue bastante enfadada y descepcionada, a pesar de que
haya sido su culpa, se lleva una mala impresión y mala imagen.
El hecho de que la mujer haya ido con
su hija pequeña a la RENIEC, crea una idealización
pues actúa queriendo conseguir algo a cambio. También se da un trabajo en equipo, pues el guardián de la puerta y
los trabajadores del interior se comunicaban mediante códigos por la radio. Finalmente
el ritual se cumple solo en el
primer caso, pues en el segundo no se cumple su objetivo.